Caminarás entre bancos y miradores de atardeceres mágicos y el Camín Real te llevará hasta la playa de la Vallina donde un viejo molino resiste impasible los embates de las tempestades.
De regreso pasarás junto al barco que recuerda cuál fue el principal sustento de la gente del lugar y podrás sentarte a descansar con la atenta mirada del Cabo Vidio y su Faro.
¿Me acompañas?
Contenido del artículo
> Mapa del sitio
> Cómo llegar al inicio de la ruta
> Características de la ruta
> Descripción de la ruta
> Track de la ruta
> Short de la caminata
Mapa del sitio
Cómo llegar al inicio de la ruta
Circulamos por la Autovía A-8 y tomamos la salida 438 en dirección CU- 8 que nos leva hasta Oviñana. Continuamos sin desviarnos hasta llegar a la iglesia que se encuentra a nuestra derecha.
Características de la ruta
- Distancia: 10. 5 km
- Dificultad técnica: Baja
- Tipo de ruta: Circular
- Desnivel: 177 m
- Apta para niños acostumbrados a caminar y mascotas.
Descripción de la ruta
Comenzamos la caminata desde la parroquia de San Roque donde estacionamos el vehículo.
Oviñana es una parroquia del concejo de Cudillero, en Asturias, que comprende 3 entidades de población: Riego Abajo, Riego Arriba y Vivigo.
Será por esta última por donde encaminaremos nuestros pasos serpenteando entre las bonitas casas hasta llegar a un sendero por encima de la playa de la Cueva que, en dirección oeste, nos llevará hasta el mirador del Sablón o del Gallo.
Este espectacular balcón cuenta con un banco en el mismísimo borde del acantilado donde podrás sentarte a contemplar la playa de la Vallina, toda la rasa costera hasta Luarca y el gran saliente de Estaca de Bares, en la lejana provincia de A Coruña.
Continuamos por el marcado sendero que cruza el arroyo de Vivigo por un puente de madera.
Toca abordar ahora una pendiente hasta un bosque de eucaliptos que conduce a la playa la Vallina donde los viejos molinos de Prudencio y Pulido no pasan desapercibidos. Será en este último donde el arroyo de Vivigo que antaño diera vida al molino, se precipita en cascada hasta los cantos rodados del arenal dejándonos una estampa de postal.
Volvemos sobre nuestros pasos en dirección a Oviñana, aunque en esta ocasión continuamos por la ancha pista sin desviarnos hacia donde poco antes habíamos atravesado la parte más sinuosa de la ruta: el empinado camino con piedras que partía del mirador del Sablón.
Una vez en el pueblo y dado que es ya la hora de comer, hacemos un alto en el restaurante que se encuentra enfrente de la iglesia para reponer fuerzas y tras dar buena cuenta de un rico pastel de andaricas, un pulpo con cachelos y unas deliciosas croquetas, emprendemos rumbo en dirección al Cabo Vidio y su faro por los barrios norteños de Oviñana.
La ida la hacemos por la zona costera que tomamos junto al pesquero Aldebarán un barco con una larga trayectoria marinera y que se ha convertido en un monumento a la memoria viva de aquellos marineros que perdieron sus vidas en esta parte de la costa.
Pasamos junto al Mirador de playa de Peña Doria con un par de bancos y un punto geodésico.
Seguimos avanzando por la franja costera hasta el extremo de cabo Vidio donde está el faro, una construcción amurallada que data de 1950 y cuya potente luz puede verse a 25 millas marinas.
Una vez aquí, regresamos por la carretera hasta el punto donde hemos dejado estacionado el vehículo.