Por la zona centro-oeste de la provincia de Valladolid, en el tramo comprendido entre Tordesillas y Castronuño que acoge en su recorrido al río Duero, se encuentra la Reserva Natural de Las Riberas de Castronuño.
La importancia de este enclave se debe a que se trata de un espacio de reproducción, refugio e invernada para una gran variedad de especies, algunas de las cuales se encuentran en grave peligro de extinción.
Contenido del artículo
> Mapa del sitio
> Cómo llegar al inicio de la ruta
> Características de la ruta
> Descripción de la ruta
> Track de la ruta
> Vídeo de la caminata
Mapa del sitio
Cómo llegar al inicio de la ruta
La ruta comienza en el aparcamiento situado a la derecha en la CL-602, a 1.1 kilómetros de Catronuño.
Características de la ruta
- Distancia: 2. 45 km
- Dificultad técnica: Baja
- Tipo de ruta: Circular
- Desnivel: 53 m
- Apta para niños y mascotas.
Descripción de la ruta
Antes de emprender este paseo por la llamada Senda de los Almendros, decidimos ahorrarnos un tramo de la misma y, durante el garbeo que nos dimos por Castronuño nos acercamos hasta el cerro de la Muela en la parte alta de la localidad.
Desde el Mirador tendremos una panorámica más elevada del paisaje que nos acompañará al principio de nuestro recorrido: el carrizal, la presa de San José y el gran encinar de Cubillas, al fondo.
Es el momento de coger el vehículo y acercarnos hasta el aparcamiento situado cerca del Observatorio de Aves, en la zona baja de la senda que discurre paralela a las embalsadas aguas del río Duero a su paso por Castronuño.
Tras atravesar un pequeño tramo de pasarela llegamos hasta un pequeño mirador a cuya derecha se encuentra el Observatorio de Aves, una caseta de madera desde la que ocultarse para observar las aves que alberga el carrizal que se abre ante nosotros.
Continuamos por nuestra izquierda en dirección a la presa de San José entre el río y la carretera CL-602 por el tramo más homogéneo de la ruta. Al llegar a un cruce señalizado cruzamos con precaución y tomamos el camino interior que nos llevará hasta el Mirador del Pinar pasando junto al arroyo Mucientes.
Iniciamos una intensa subida entre tomillos, pinos, encinas y almendros al tiempo que vemos alguna loma cultivada. Tras el esfuerzo nos desviamos por un pequeño llano que nos llevará entre pinos hasta una de las atalayas más sorprendentes de toda la Reserva Natural: El Mirador del Pinar.
Desde esta privilegiada situación, a nuestros pies divisamos la Presa de San José, la localidad de Castrouño y el Encinar de Cubillas.
Regresamos sobre nuestros pasos para enlazar de nuevo con la senda que nos conduce entre almendros centenarios y campos de cultivos al aparcamiento donde iniciamos esta bonita caminata.
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