En las faldas de Sierra Alhamilla, a medio camino entre el desierto de Tabernas y la costa mediterránea, se alza la Villa de Níjar.
Considerado como uno de los "Pueblos más bonitos de España", sus calles estrechas y laberínticas y sus casas blancas adornadas por coloridas macetas ofrecen la típica estampa de pueblo almeriense que no te dejará indiferente.
Cómo llegar
La mejor opción para llegar a Níjar es tomando la Autovía del Mediterráneo A-7 hasta llegar a la salida 479 en dirección Níjar, San Isidro. A partir de aquí solo hay que seguir las indicaciones que encontraremos en las dos rotondas que nos vamos a encontrar.
Rincones bonitos de Níjar
Mirador de Níjar
Empezamos nuestra andadura por Níjar subiendo hasta este mirador ubicado a la entrada junto a una rotonda.
Desde aquí ya podemos hacernos una primera idea de que nos espera un pueblo típicamente andaluz de casas blancas y empinadas cuestas.
Barrio de las Eras
Emprendemos camino en busca del Casco Antiguo caminando por uno de los barrios más antiguos de Níjar, el barrio alfarero de las Eras. Aquí abundan las tiendas y talleres que siguen fabricando piezas de forma artesanal.
La cerámica de Níjar, muy apreciada en todo el mundo, destaca por sus reminiscencias africanas en cuanto a la temática y colores, aunque también ha sabido adaptarse a las nuevas tendencias.
Este Monumento ubicado en una pequeña plaza próxima al Centro de Artes Escénicas, nos da la bienvenida a la "Villa artesana de Níjar".
Mirador del Cerro de la Atalaya
Seguimos ascendiendo hacia la zona más alta del pueblo.
Dentro del espacio donde se levanta la Torre Vigía se encuentra este mirador que nos ofrece la mejor de las panorámicas de Níjar y sus huertos.
Torre de la Atalaya
Esta torre levantada en mampostería, constituye el resto más visible de la fortificación que defendió esta localidad durante la época del dominio musulmán. La torre actual debió edificarse en torno al siglo XVI, y muy posiblemente ha tenido que ser objeto de numerosas restauraciones como consecuencia del deterioro producido por el abandono o por el efecto de los numerosos terremotos registrados en la zona desde su construcción.
Barrio de El Portillo
Si primero hemos tenido que subir por calles empinadas hasta llegar a La Atalaya, ahora nos toca descender adentrándonos en la parte más pintoresca de Níjar que nos recuerda su pasado árabe.
En este barrio es donde mejor se aprecia la huella estética dejada por los musulmanes, con sus casas encaladas y las fachadas repletas de macetas con flores, buganvillas y jazmines, además de las puertas ventanas pintadas con vivos colores.
Inmersos en pleno casco antiguo pasaremos junto al Museo del Agua que se encuentra en la antigua Plaza del Mercado donde también destacan la Fuente de 3 caños y sus centenarios árboles.
Plaza la Glorieta
Llegamos al corazón de la localidad donde se encuentran algunos de los edificios más destacados como su iglesia y el Ayuntamiento.
Iglesia de Santa María de la Anunciación
De estilo mudéjar se construyó en el siglo XVI. Mantiene el reloj original de la torre y, en su interior destaca una Inmaculada de Alonso Cano del siglo XVIII.
0 comments:
Publicar un comentario