domingo, 9 de marzo de 2025

Qué ver en Púbol, la fortaleza de Dalí

Dentro del conocido como "Triángulo Daliniano",  Púbol es un  coqueto y pequeño pueblo que completa este trío junto a Portlligat (Cadaqués) y Figueres. 

En Púbol, el tiempo parece detenerse. Sus calles estrechas, sus casas de piedra y su arquitectura medieval convierten a este pintoresco lugar en una joya escondida que aún mantiene su esencia auténtica. Si planeas visitar la Costa Brava, Púbol es un destino que no puedes perderte. Sus escasas casas se agrupan en torno al Castillo que da notoriedad al pueblo por haber sido un regalo da Dalí a su amada gala.

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CONTENIDOS DEL ARTÍCULO

¿Dónde está Púbol?

El Castillo de Gala: El Tesoro de Púbol

Rincones que visitamos:

📌 Can Canada

📌 Castillo Museo de Gala - Dalí

📌 Iglesia de Sant Pere

📌 Ca la Sorda

📌 Can Carles

Naturaleza y paisajes en los alrededores 

Gastronomia local: Sabor de la Costa Brava

Púbol en la cultura popular

Qué ver en los alrededores

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¿Dónde está Púbol?

Púbol es una entidad de la Pera, en el Baix Empordá, en la provincia de Girona. Se ubica a unos 10 km al norte de la ciudad de La Bisbal d'Empordà, y aproximadamente a unos 30 km de la costa.

El Castillo de Gala: El Tesoro de Púbol

Uno de los principales atractivos de Púbol es el Castillo de Gala, un antiguo castillo medieval que Salvador Dalí compró en 1982 para su esposa, Gala. El artista surrealista lo transformó en su refugio personal, y desde entonces el castillo ha estado asociado con su figura.

Este castillo, situado a las afueras del pueblo, es una mezcla única de arte, historia y naturaleza. Dalí no solo lo decoró con sus propias creaciones, sino que también hizo de él un santuario para Gala, quien pasó allí muchos años de su vida. La decoración interior del castillo incluye un sinfín de detalles surrealistas que permiten sumergirse en el mundo de Dalí: espejos, cuadros y esculturas que evocan su característico estilo.

Hoy en día, el Museo Castillo de Gala-Dalí está abierto al público, permitiendo que los visitantes exploren los exquisitos jardines del castillo, las habitaciones decoradas de manera única y las colecciones de arte del genio surrealista. Es una parada obligatoria para los amantes del arte, la cultura y, por supuesto, los seguidores de la obra de Salvador Dalí.

Rincones que visitamos

Caminamos por Púbol, disfrutando de sus calles empedradas y de la atmósfera tranquila que caracteriza a este tipo de pueblos. Las calles de Púbol, aunque no sean muy largas, tienen un encanto especial, con casas de piedra, portales antiguos y rincones que parecen sacados de una pintura.



Nos dejamos llevar por el laberinto de callejuelas  disfrutando de la arquitectura típica de la zona, que ha sido cuidadosamente preservada. Hay rincones encantadores en cada esquina para hacer fotos o simplemente contemplarlos.

Can Canada

Empezamos el recorrido por este pequeño pueblo dirigiéndonos al Castillo pero antes pasaremos por esta construcción que fue edificada en el siglo XVIII tal y como lo atestigua la inscripción en el dintel de una de sus ventanas.

Por un paso que atraviesa la casa y que formaba parte del antiguo cercado amurallado, accedemos a la plaza Mayor.

Plaza Mayor

Se trata de un espacio abierto que poco ha cambiado con el tiempo ya que sus edificios continúan manteniendo el aspecto medieval de los siglos XVI y XVII.

Como en muchos pueblos medievales, la plaza principal es el corazón del lugar. En Púbol, la Plaza Mayor es un espacio tranquilo, rodeado de casas de piedra y edificios de época que invitan a disfrutar de la calma y belleza del pueblo.

Castillo Museo de Gala - Dalí

Continuamos rumbo al Castillo o fortificación gótica renacentista de Gala Dalí. Su construcción data del siglo XI y aparece por primera vez mencionado en 1065 cuando su propietario, Bastons, lo cede a los Condes de Barcelona. Cuando Salvador Dalí lo adquiere en 1969, se encontraba en pésimo estado y el genio tuvo que emplear todo su extraordinario talento creativo.

La decoración interior fue íntegramente creada por el artista y el castillo llegó a convertirse en lugar descanso y refugio de su esposa Gala.

Allí pudimos visitar la impecable habitación de Gala, su llamativo y para nada convencional baño, la muy nutrida biblioteca, el salón de piano en el que ella escuchaba extasiada los acordes melódicos que vibraban cuando Dalí ejecutaba alguna partitura, su oratorio personal, su colección de trajes de fiesta, la sencilla y blanca cocina, etc.

Otro espectáculo que merece un comentario aparte es el jardín y una serie de exóticas esculturas de elefantes de largas patas, que se encuentran diseminados en diferentes espacios verdes que fueran diseñados por el mismo Salvador Dalí, así como también el Pozo con las cabezas de Wagner que construyó en su homenaje.

Con el paso de los años, entre 1982 y 1984, este se lugar se convirtió en su último taller y en el mausoleo para su musa donde se encuentra enterrada.

Iglesia de Sant Pere

Junto al castillo se encuentra la Iglesia de Sant Pere que en su origen era la capilla del castillo. Fue edificada sobre la iglesia original, en el siglo XV.

El templo fue uno de los más ricos de la comarca, hasta la Guerra Civil, cuando sus tesoros fueron destruidos, excepto el retablo gótico, obra de Bernat Martorell, que se conserva en el Museo Diocesano de Girona.

Ca la Sorda

Situada en la confluencia de las calles Major y del Quintà, nos encontramos con esta casa construida a partir de una torre fortificada, de la que conserva aspilleras, tanto en el paramento de la calle Major, en la parte baja, como en la calle del Quintà, en la altura del primer piso. La construcción ha experimentado diversas modificaciones a lo largo del tiempo.

Can Carles

Y, por último, situada en la calle Major de Púbol, junto a la plaza Major, vemos esta casa de planta baja y un piso, con cubierta de teja. Presenta un gran portal de acceso de medio punto, adovelado, y una ventana geminada de arcos trevolats en la parte superior, de tipo gótico. En el lado izquierdo hay otra puerta adovelada, de arco rebajado, y una ventana geminada.

Naturaleza y paisajes en los alrededores

El entorno de Púbol también es ideal para aquellos que buscan disfrutar de la naturaleza. El pueblo está rodeado de campos, colinas y bosques que ofrecen diversas rutas de senderismo y paseos en bicicleta. El Parque Natural de las Islas Medas está a solo unos kilómetros, lo que hace que este rincón de la Costa Brava sea perfecto tanto para el arte como para los amantes de la naturaleza.

Además, si te diriges hacia el mar, en Pals, que está muy cerca, podrás disfrutar de las playas de la Costa Brava, que se caracterizan por su belleza y tranquilidad. No olvides que la zona es perfecta para disfrutar de actividades al aire libre como el snorkel, el senderismo o incluso el golf, ya que el Campo de Golf de Pals es uno de los más conocidos de la región.

Gastronomía local: Sabor de la Costa Brava

En Púbol y sus alrededores, la gastronomía juega un papel fundamental. Los restaurantes y masías de la zona ofrecen productos locales de alta calidad, como el aceite de oliva virgen extra, los embutidos de la comarca y una amplia variedad de pescados y mariscos frescos.

Uno de los platos más representativos de la región es el suquet de peix, un guiso tradicional de pescado que puedes degustar en muchos de los restaurantes cercanos. Además, no dudes en probar los vinos de la D.O. Empordà, que acompañarán perfectamente cualquier comida.

Púbol en la cultura popular

Además de su fama por el vínculo con Dalí, Púbol también ha aparecido en diversas producciones cinematográficas y literarias, lo que le ha dado una cierta popularidad internacional. El castillo y el ambiente mágico del pueblo han inspirado a muchos artistas a lo largo de los años, y su conexión con el surrealismo sigue viva.

Qué ver en los alrededores

Los alrededores de Púbol ofrecen una gran variedad de paisajes, actividades y lugares interesantes para explorar, tanto para los amantes de la historia como de la naturaleza. Aquí te dejo algunas recomendaciones de qué ver y hacer en las cercanías:

1. Castillo de Peratallada

A solo 15 minutos en coche de Púbol, Peratallada es otro de los encantadores pueblos medievales de la región. Su castillo, que data del siglo XII, está rodeado de murallas y fosos, y sus calles empedradas te transportarán a tiempos pasados. Es uno de los pueblos más bonitos de la Costa Brava, y es un lugar ideal para pasear, explorar su arquitectura medieval y disfrutar de la tranquilidad.

2. Pals

A unos 20 minutos en coche, el pueblo de Pals es otro de los destinos imprescindibles de la comarca del Baix Empordà. Con su bien conservado casco antiguo medieval, el Pueblo de Pals te sorprenderá con sus callejones empedrados, su Torre de las Horas, y las maravillosas vistas que ofrece de los alrededores. Además, está muy cerca de la Playa de Pals, un espacio natural perfecto para pasar el día junto al mar.

3. La Bisbal d'Empordà

A tan solo 10 minutos de Púbol, La Bisbal d'Empordà es conocida por su tradición alfarera. El pueblo alberga numerosos talleres de cerámica, donde los artesanos producen las famosas piezas de cerámica del Empordà. También puedes visitar el Castillo de la Bisbal, una fortaleza medieval que ofrece unas vistas impresionantes de los alrededores y el Museo de la Cerámica para conocer más sobre esta tradición.

4. Parque Natural de las Islas Medas

Si eres amante de la naturaleza y el mar, el Parque Natural de las Islas Medas es una de las zonas más bellas de la Costa Brava. A unos 30 minutos en coche de Púbol, puedes disfrutar de actividades como el snorkel o el buceo, ya que este parque marítimo es conocido por su rica fauna marina. Si prefieres quedarte en tierra firme, la vista de las islas desde las playas cercanas, como la Playa de L'Estartit, es simplemente espectacular.

5. Ruinas de Empúries

A unos 30 minutos de Púbol, en la localidad de L'Escala, encontrarás las ruinas de Empúries, uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de la Costa Brava. Este antiguo asentamiento griego y romano ofrece una visión fascinante de la vida en la antigua Grecia y Roma, y sus ruinas están junto al mar, lo que hace de la visita una experiencia única. No te pierdas el Museo de Empúries, donde podrás aprender más sobre la historia del lugar.

6. Cala Montgó (L'Escala)

A unos 35 minutos de Púbol, Cala Montgó es una de las calas más bonitas y tranquilas de la Costa Brava. Esta cala está rodeada por un entorno natural impresionante y es perfecta para nadar, hacer snorkel o simplemente relajarte junto al mar. Desde aquí, también puedes hacer una pequeña caminata por el Camí de Ronda, un famoso sendero que recorre los acantilados y ofrece vistas panorámicas del litoral.

7. Caminos de Ronda

El Camí de Ronda es una ruta costera que conecta varias playas y calas de la Costa Brava. Desde el Cap de Creus hasta Tossa de Mar, estos senderos ofrecen unas vistas espectaculares del mar Mediterráneo, y son perfectos para hacer senderismo. Desde lugares cercanos como Llafranc o Calella de Palafrugell, podrás recorrer parte de estos caminos, disfrutando de paisajes naturales, acantilados y calas ocultas.

8. Empordà Golf

Si te gusta el golf, puedes disfrutar de unas horas de deporte en el Empordà Golf, uno de los campos de golf más prestigiosos de la región. Situado cerca de Pals, a unos 20 minutos en coche, el campo cuenta con dos recorridos de 18 hoyos rodeados de un paisaje impresionante, perfecto para relajarse mientras disfrutas de la naturaleza.

9. Ruta del Vino del Empordà

La Ruta del Vino del Empordà te permite conocer las bodegas locales y degustar los vinos de la región. Muchas de estas bodegas, ubicadas a lo largo de la costa y el interior, ofrecen visitas guiadas donde podrás aprender sobre el proceso de producción del vino y probar algunos de los mejores caldos de la D.O. Empordà. En Púbol y sus alrededores, esta ruta es una excelente manera de disfrutar de la gastronomía local.

10. Cala Sa Boadella (Lloret de Mar)

A unos 40 minutos de Púbol, Cala Sa Boadella es una cala aislada y tranquila, famosa por su belleza natural y su ambiente relajado. Esta playa de aguas cristalinas y arena dorada está rodeada de vegetación, lo que la convierte en el lugar perfecto para pasar un día de sol en un entorno más privado.

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