domingo, 18 de junio de 2023

Por el norte de Gran Canaria

Nos dirigimos a la zona más salvaje de la isla donde los riscos y acantilados de la costa conviven en armonía con otros espacios del interior en los que la naturaleza más abrupta es la auténtica protagonista.

¿Qué vamos a conocer?

  • Teror
  • Firgas
  • Arucas
  • Agaete

Teror                                               

Situado en las medianías, hacia el norte de Gran Canaria con un paisaje repleto de barrancos y montañas, Teror es lugar de caminos y peregrinos que se cruzan y se encuentran, de gente sencilla y acogedora, de comerciantes, artesanos y artistas. Combina historia, monumentalidad y naturaleza a partes iguales, y al mismo tiempo es un referente incuestionable de la religiosidad y tradiciones de Canarias.

El Centro Histórico de Teror constituye uno de los patrimonios culturales más importantes de Canarias, con una entidad religiosa y social que ha quedado impregnada en sus calles, casas, plazas y monumentos.

 La Calle Real de la Plaza

Empezamos nuestra visita por la arteria central del casco urbano y el escenario que durante cinco siglos ha sido testigo de los grandes acontecimientos del municipio. Esta vía principal recorre con una ligera curvatura el trayecto desde la misma entrada a Teror en el Muero Nuevo hasta la Plaza del Pino, donde se alza majestuosa la fachada de la Basílica.


La arquitectura de sus casas es dispar pero predomina u distinguido carácter señorial con el balcón elemento común. Los hay de todos los estilos, de madera, hierro forjado, con balaustres, con tejado o sin él. Los más antiguos y llamativos so los de techumbre de tejas realizados con madera de tea que hacen las funciones de tribuna o palco hacia la calle en el paso de las procesiones y eventos sociales.


Estamos en la calle comercial por excelencia y en ella se mantienen algunos de los establecimientos más antiguos del municipio. Aquí llegaban directamente desde el puerto de Las Palmas las últimas novedades, sobretodo las relacionadas con el sector textil.

Plaza Teresa de Bolívar

Girando en la Calle de la Escuela llegamos hasta esta plaza que debe su nombre a la mujer de Simón Bolívar, bisnieta de Bernardo Rodríguez del Toro, insigne personaje nacido en Teror en el siglo XVII.

Fue configurada en 1958 como desahogo a la Plaza del Pino, ante la gran afluencia de peregrinos y visitantes. Destacan sus dos fuentes, una adosada a la pared con un pino labrado en piedra sobre el que sitúa el escudo de la familia Rodríguez del Toro; y otra en forma de pilar construida en piedra amarilla.

La Torre Amarilla

Volvemos sobre nuestros pasos para dirigirnos por la Calle Real de la Plaza a la Basílica de Nuestra Señora del Pino donde enseguida vemos la Torre amarilla del campanario. Fue inaugurada en 1708 y es llamada así por el color de su piedra. Es uno de los pocos elementos arquitectónicos que se conservan del segundo templo que precedió al edificio actual.

Basílica de Nuestra Señora del Pino

Estamos ante el edificio más significativo de la Villa Mariana Teror y uno de los más importantes de la isla que custodia en su interior la imagen de la virgen del Pino, patrona de la diócesis de Canarias. En torno a este templo que fue levantado entre 1760 y 1767 se configuró el desarrollo urbano de Teror.


En abril de 1979, el entorno de la Basílica fue declarado Conjunto Histórico-artístico.

La Plaza del Pino

Es la antesala de la Basílica del Pino y el espacio público más importante del Centro Histórico donde han tenido lugar los acontecimientos más importantes del municipio siendo el espacio donde tenían lugar las celebraciones de las fiestas, las ferias y mercado dominical.



La Plaza que no tiene un estilo arquitectónico definido, es de forma irregular y aquí construyeron sus viviendas las familias más distinguidas en el entorno del templo mariano.

Casa Consistorial

En la calle Padre Cueto encontramos el Ayuntamiento, cuyo edificio fue adquirido en 1909 por 7.500 de las antiguas pesetas con la finalidad de establecer en él las escuelas públicas. Sin embargo, acabó siendo la Sede de la Casa Consistorial añadiéndole una segunda planta entre 1945 y 1952.

 El Palacio Episcopal

Situado en la parte de atrás de la Basílica, estamos ante otra de las obras emblemáticas del Centro Histórico. Aprovechando los materiales sobrantes del templo se construyó este edificio que fue restaurado en 1982. Una parte del edificio acoge la Casa de la Cultura y la parte mas antigua es utilizada por la parroquia para actividades religiosas.

La Alameda

La Alameda también es conocida como Plaza Pío XII y ocupa todo el frontal del Palacio Episcopal. Fue proyectada en el año 1844 pero debe su estado actual a una remodelación llevada a cabo en 1981 cuando se rehabilitó el Palacio Episcopal.

En 1926 se construyó un kiosko en la Alameda que convirtió la Plaza en el principal punto de encuentro y lugar de recreo al aire libre. En la actualidad aquí se celebran actos culturales y festivos y es uno de los rincones más frecuentados por cuantos visitan el Centro Histórico.

Firgas                                              

Firgas es el municipio con menor extensión de la isla y aunque no tiene salida al mar, se le conoce como el Balcón del Atlántico por las vistas que nos regala de dicho océano y de parte de la geografía de Gran Canaria.

Al caminar por sus calles descubriremos un pueblo coqueto donde en pleno casco urbano el agua en forma de cascada da vida a la antigua calle real y hace las delicias de aquellos que nos asomamos a Firgas por primera vez.

Fuente de las Ranas


Plaza de San Roque

La Plaza de San roque constituye el centro neurálgico del municipio desde tiempos inmemorables. En ella se levantó la Afurgad (nombre aborigen que recibió Firgas en sus inicios y que significa Atalaya).



Aquí vemos el monumento a uno de los santos de más antigua veneración por los firguenses, San Juan de Ortega, primer patrón de la Villa y paisano de la familia de conquistadores que se asentaron en Firgas, los Rodríguez de Palenzuela.

En esta misma plaza se encuentra el edificio del Ayuntamiento, la Iglesia de San Roque, la Casa de Cultura y, sin necesidad de salir de ella, podemos contemplar la Acequia Real.

Mirador de la Plaza de San Roque

En la misma Plaza nos situamos en su mirador desde el que se puede contemplar una excelente panorámica de La Isleta, La Bahía de Las Palmas de Gran Canaria, la Montaña de Areca, parte de la franja norte costera de la isla conocida como Costa Lairaga (Bañaderos y San Andrés), la Villa de Moya, toda la zona baja de la Villa de Firgas, y en los días despejados podemos llegar a ver Tenerife y Fuerteventura.

Edificio de la Casa de Cultura

El edificio de la Casa de la Cultura es, probablemente, el más emblemático del municipio. Antiguamente hotel o fonda, fue construido en 1870 para alojar a los usuarios que acudían a los baños de Azuaje. Posteriormente, el edificio albergó la sede del Ayuntamiento y de la Escuela Pública. En la actualidad, dentro de sus muros se ubican la Biblioteca Municipal, una Sala de Exposiciones y un Salón de Actos.

Ayuntamiento

El edificio sede del Ayuntamiento de Firgas es una casona de estilo neo-canario construido en la década de los años 40.

Iglesia de San Roque

La Iglesia está levantada sobre las ruinas de lo que fue la primitiva ermita de San Juan Ortega de la que aún se mantiene la fachada, sin el campanario y la puerta principal. La Actual parroquia de San Roque abre sus puertas en el año 1845 y en el año 1004 hubo de ser restaurado por peligro de desplome de sus techos.

El Paseo de Gran Canaria y el Paseo de Canarias

Estas vías peatonales con una pendiente natural nos regalan una cascada artificial de 30 metros de largo, construida en piedra de cantería y coronada con una fuente que representa la riqueza del agua en la zona que fluye libremente durante todo el año. Se trata de la zona que corresponde la Paseo de Gran Canaria.



En un lateral del mismo lucen orgullosos los 22 escudos heráldicos con sus correspondientes bacos que representan a todos los municipios de Gran Canaria, además del escudo insular que tampoco podía faltar. Todos ellos han sido realizados con azulejos sevillanos.


Subiendo por las escaleras llegamos hasta el Paseo de Canarias donde podremos ver una muestra de todas las islas Canarias en unos murales de azulejo y con cada isla tallada en 3D sobre piedra de cantería de Arucas.

Arucas                                            


Arucas, la tercera ciudad más grande de Gran Canaria nos espera mostrando la mejor versión de una ciudad que hubo de ser reconstruida tras la destrucción que trajo consigo la conquista castellana que originó la destrucción del asentamiento original en 1478.

Museo del Plátano


En hacienda la Rekompensa, el museo del Plátano ofrece la oportunidad de conocer la historia de esta fruta desde su inicial cultivo en Papúa Nueva Guinea hasta la actualidad.

Plaza de San Juan

Empezamos nuestro paseo  por la Plaza de San Juan fiel testigo durante años de las transiciones comerciales de los aruquenses y del transcurrir de su día a día. Aunque ahora caminamos sobre una amplia acera de losas, originalmente el piso era de tierra. 

De la Plaza de San Juan se podría decir que es el conjunto arquitectónico de mayor valor social e histórico de Arucas. Desataca la evolución arquitectónica de las viviendas que la rodean y que pertenecen a siglos diferentes, desde el siglo XVII al XX.

Parroquia de San Juan Bautista

Conocida popularmente como la Catedral de Arucas desde su reconstrucción a principios del siglo XX, este majestuoso templo de estilo neogótico, se ha convertido en el símbolo identificativo de esta localidad. Fue esculpida íntegramente en piedra azul, sin tecnología ni mecanización, por los canteros de la zona e impulsada por los habitantes de un pueblo que no cesaron hasta tener su propio lugar de culto. La primera piedra se colocó en 1909 y fue abierta al público en 1917.


En su interior destacan obras de gran valor patrimonial com el Cristo Yacente de Manolo ramos y las vidrieras de origen francés restauradas recientemente. 

Museo Municipal de Arucas

En el interior del Jardín Municipal se encuentra este Museo que fue en su tiempo la casa del Mayorazgo de Arucas, del siglo XIX, y posteriormente vivienda de la familia Gouré.

En el Museo se pueden ver las exposiciones itinerantes que durante todo el año se presentan en sus instalaciones, junto con las salas permanentes de los artistas Manolo Ramos, Santiago Santana, Guillermo Sureda y Abraham Cárdenes y alumnos.

Parque Municipal

Este magnífico jardín alberga un gran número de plantas exóticas y autóctonas. Aunque inicialmente era la finca privada del Mayorazgo de Arucas, más tarde, la familia Gourié la destinó a zonas de cultivo y uso recreativo.



En 1947, la Comisión Gestora Municipal emprendió las primeras expropiaciones de la antigua finca, declarándola de interés público ante la intención de convertirla en zona urbanizada.

Rincones de Arucas




Agaete                                              



Al noroeste de Gran Canaria, abierto al Océano Atlántico, se encuentra esta villa marinera que nos regala un contraste de singulares paisajes. Pasaremos por encima de los impresionantes acantilados que surgen del mar en el Puerto de las Nieves, al tiempo que llegamos hasta el Pinar de Tamadaba a 1000 metros de altura próximo al centro de la isla.

La pesca en esta parte de la isla es también su sello de identidad conservando todo el estilo tradicional y artesanal de otros tiempos. De ahí que su gastronomía se distinga especialmente por el pescado fresco que ofrece donde podemos destacar: el caldo de pescado, la parrillada de pescado fresco, sardinas asadas y la paella marinera.

Ayuntamiento



El Ayuntamiento de Agaete ocupa las instalaciones de un edificio ejemplo de vivienda de la burguesía canaria y que perteneció a la familia de Armas. Entre los elementos destacables de esta construcción podemos mencionar el patio interior alrededor del cual se distribuyen las distintas dependencias tal y como es habitual en la arquitectura tradicional canaria.

Mirador de la Cruz


Iglesia de la Inmaculada Concepción

La primera piedra de esta iglesia fue puesta por el Obispo Urquinaona en el año 1874 después de un incendio devastara por completo el antiguo templo.


Si por algo es conocida Algaete a nivel regional, nacional e incluso internacional, es por su famosa Bajada de la Rama. Muy cerca de esta iglesia se encuentra el Museo de la Rama que custodia los elementos más característicos de esta fiesta.

Ermita Nuestra Señora de las Nieves


Si algo destaca dentro del rico Patrimonio Histórico de Agaete, eso es  la Ermita de Nuestra Señora de las Nieves y su policromado artesonado mudéjar, además del tríptico flamenco homónimo atribuido a Joos Van Cleve, una joya artística que data del siglo XVI.

Puerto de las Nieves

El puerto de las Nieves es el lugar ideal para darse un chapuzón en las limpias aguas del Océano Atlántico. Los aficionados al buceo también podrán recrearse admirando sus vírgenes fondos marinos en cualquiera de las zonas de baño de esta costa como la Playa de las Nieves y las Piscinas Naturales.




Aquí encontraremos una variada oferta de restaurantes donde saborear los platos típicos del lugar.

Las Salinas de Agaete

Junto a un llamativo palmeral y huertas cultivadas destacan las tres piscinas naturales que cubiertas de agua oceánica simulan una fortaleza medieval. Están protegidas del mar abierto por altos muros de hormigón  a modo de almenas que nos evocan un castillo en medio del mar.


Conectadas entre sí por tubos volcánicos,  cada piscina tiene un tamaño y profundidad diferente, y la calidad del agua es óptima ya que el continuo vaivén de las mareas renueva constantemente sus aguas.

Rincones bonitos de Agaete









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