La Guardia o A guarda, en gallego, es el municipio más meridional de la provincia de Pontevedra, en la desembocadura del río Miño que le sirve de frontera natural con Portugal y donde forma un amplio y hermoso estuario antes de mezclarse con el mar.
Desde el año 2001 es Municipio de Interés Turístico.
Un poco de información
A Guarda destaca sobretodo por su variado paisaje que en 20,5 kilómetros nos ofrece el Estuario del Miño, la costa Atlántica y sus dos montes: el Monte Torroso y el Monte Santa Trega con su imponente castro y vistas.
La vida guardesa transcurre en torno al puerto pesquero y recientemente ha sido premiada como Destino de Excelencia Europea (EDEN).
A Guarda posee también uno de los conjuntos arquitectónicos más interesantes de casas indianas en Galica, por ello nos ofrece una ruta recorriendo una selección de ellas dentro del centro urbano.
Qué ver en A Guarda
El castillo de Santa Cruz.
Su construcción se inició en 1663 tras la toma de Goián por las tropas portuguesas. De este castillo que en la actualidad solo conserva un restaurado recinto amurallado, nadie diría que en su día fue un fuerte con cuatro baluartes y dos puertas de acceso.
El castro de Santa Trega.
Ubicado en el monte que lleva su mismo nombre, representa una de las muestras más importantes de la cultura castreña del noroeste peninsular.
Destaca por su extensión y buen estado de conservación; por ello, ha sido declarado Monumento Histórico-Artístico en 1931.
El Puerto
Estar en A Guarda implica visitar el puerto y pasear por sus calles peatonales con las típicas casas marineras, estrechas, de varios pisos y vivos colores que le hacen singular. El paseo peatonal donde abundan los restaurantes y terrazas, invita a sentarnos y degustar la rica gastronomía del lugar.
En el muelle podemos observar a los marineros en plena faena con sus embarcaciones y aparejos de pesca o disfrutar con la curiosa venta del marisco y pescado en la lonja. Aquí está la nave de Redeiras donde las mujeres trabajan a diario elaborando y arreglando las redes.
El Malecón cierra y protege el puerto de la bravura del mar. Está pintado como si de un lienzo gigante se tratara y en él se han plasmado las típicas casas marineras además de la vida cotidiana de A Guarda.
Una antigua fortaleza circular construida por los portugueses alberga actualmente el Museo del Mar, donde además de contenidos etnográficos expone también una importante colección de conchas marinas.
El casco antiguo
- Plaza de San Marcos
- Torre del Reloj
- Iglesia de Santa María
- Tramos de la muralla medieval
- Convento de San Benito
- Monumento do mariñeiro perdido
El casco urbano
Se organiza en torno al puerto pesquero con calles repletas de comercios con una amplia gama de productos. En la bajada al puerto se encuentra la Plaza de Abastos que abre en horario de mañanas y ofrece productos frescos y de gran calidad.
Las playas
Además de permitir unas vistas excepcionales de Portugal y la desembocadura del río Miño, son 4 las playas que además están delimitadas por un agradecido pinar que invita a descansar y protege del sol los días más calurosos:
- O Muíño, justo en la desembocadura tiene fora de concha y fina arena blanquecina.
- A Lamiña, a continuación de la anterior y bordeada por un pinar.
- A Armona, siguiendo a las anteriores.
- O Codesal, antes del embarcadero del ferry, es lugar habitual de alimentación de las aves..
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