Atravesada de este a oeste por el río Duero, perteneciente a la provincia de Zamora y ciudad histórica y monumental, además de contar con vino con Denominación de Origen, no podía ser otra que Toro.
Las zarceras que podemos tropezar en la mayoría de las casas y aceras son la evidencia de la gran cantidad de bodegas en las que bajo tierra se elaboraba el vino desde tiempo muy atrás.
Puntos de interés:
Puerta de la Corredera.
Puerta del Mercado. Levantada en el siglo XVIII, la leyenda dice que la argamasa utilizada para su construcción se elaboró con vino pues resultaba más rentable que traer el agua Del Río Duero.
Arco del Postigo.
Iglesia de San Pedro del Olmo.
Palacio de las Leyes.
Alcázar de la ciudad de Toro. De esta fortaleza únicamente quedan sus muros. Fue el último refugio de Juana la Beltraneja antes de perder la guerra contra Isabel la Católica.
Colegiata de Santa María la Mayor. Casi un siglo duró su construcción pero mereció la pena. Reinaban Sancho IV de Castilla y su esposa, María De Molina cuando por fin concluyó su construcción. Las dos etapas de dicha construcción dejaron huella en ella pues la piedra caliza que se empleó para levantar el edificio dio paso a la piedra arenisca en tonos rojizos.
Monasterio de Sancti Spíritus el Real que fundado en el siglo XIV acogió el retiro de diversas damas de la nobleza tales como Beatriz de Portugal de origen luso y quien trajo consigo una numerosa corte tras enviudar del rey Juan I de Castilla.
Arco de Santa Catalina
Santa María De la Vega
S. Lorenzo el Real es una de las iglesias más antiguas de Toro. De estilo románico-mudéjar y sepulcros góticos del siglo XVI.
La reja dorada. Si continuamos caminando por la misma calle De la Iglesia de S. Lorenzo el Real, tan solo unos metros más, nos encontramos con ella.
La plaza de toros, en la plaza de San Francisco. Es una de las plazas más antiguas y mejor conservadas de España. Fue construida en el año1828.
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