El tercer día toca visitar uno de los lugares más impresionantes de Egipto, Abu Simbel. Sin embargo, cubrir los 289 kilómetros que separan Asuán de este conjunto arqueológico tiene daños colaterales como el de pegarnos un buen madrugón y tirarnos más de 3 horas en un autobús.
Nos recogieron a las 4:00 del la mañana y con un picnic de desayuno nos dirigimos hacia el punto del que parten todos los vehículos con destino a los famosos templos y cuya carretera abren a las 5:00. Tras pasar varios controles policiales durante el trayecto, llegamos a nuestro destino.
Templos de Abu Simbel
Al sur de Egipto, en Nubia, se encuentra este espectacular emplazamiento arqueológico compuesto por dos templos que fueron excavados en la roca durante la época del faraón Ramsés II en el siglo XIII a.C :
- El Gran Templo de Abul Simbel o Templo de Ramsés II.
- El Templo Menor de Abul Simbel o Templo de Nefertari.
Para ampliar la información…
Antes de emprender el camino de vuelta y mientras nos reagrupábamos, hicimos una parada en la cafetería del lugar en la que por 3 cafés pagamos la friolera de 10 euros para nuestro asombro. Después hubo que pasar por unos puestos de mercadillo donde te abordaban “sin agobiar” (es lo que ellos decían) e insistían bastante.
Finalizada la primera visita del día, regresamos al crucero justo a tiempo del almuerzo alrededor de la 1:30. Una hora después, la motonave iniciaba la navegación aguas arriba en dirección a la ciudad de Kom Ombo.
Decir que durante el regreso , entre cabezada y cabezada, tuvimos ocasión de ver los famosos espejismos del desierto.
Templo de Kom Ombo
El templo de Sobek y Horus es un curioso templo doble o simétrico dedicado a estos dioses que se encuentra sobre una colina en Kom Ombo, a orillas del río Nilo. Fue construido por mandato de Ramsés II entre el 1350 y 180 a.C.
Regresamos a la motonave cuando ya ha oscurecido para cenar a las 8:30 y navegar rumbo a Edfú.
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