miércoles, 8 de febrero de 2023

Guía para conocer los mejores rincones de Carmona

 En la provincia de Sevilla, nos espera Carmona, una de las ciudades de mayor abolengo histórico  que se eleva a 235 m. de altitud dominando Los Alcores, La Vega y Las Terrazas. Aquí pasearemos por un sinfín de rincones que nos permitirán disfrutar de su gastronomía, su gente y sus bares.


Iglesias, plazas, palacios y murallas dan vida a un casco antiguo que refleja una gran riqueza histórica fruto de las diferentes culturas que han pasado por el lugar. En tan solo unos pocos metros viajaremos del Neolítico a la época romana, la Edad Media o los años 30.

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Un poco de historia                                                     

Sus orígenes se remontan al Neolítico y en sus alrededores se han encontrado ricos yacimientos prehistóricos.

Uno de los períodos más brillantes de Carmona coincide con el asentamiento romano. Por aquí pasaba la Vía Augusta, usada y conocida en la Edad Media con el nombre de El Arrecife y de la que un puente y algunos restos son testigos.

Los romanos la llamaron Carmo y los árabes Qarmuna.

Durante la época musulmana Carmona conservó su importancia y los alcázares, mezquitas y otros edificios dan buena cuenta de ello.

Su territorio municipal fue delimitado por Alfonso X el Sabio. También se benefició de los favores de Pedro I, el Cruel, que engrandeció y transformó el Alcázar de la Puerta de Marchena. 

En 1630, Felipe IV le concedió el título de ciudad. 

Rincones imperdibles                                                    

Necrópolis romana

Casi por casualidad, excavadas en la roca de los Alcores, fue descubierto en 1868 este conjunto funerario compuesto por centenares de cámaras sepulcrales. 

Abundan las hornacinas para cenizas ya que el ritual de enterramiento que utilizaban era la incineración colocando los cadáveres en quemaderos dentro de la roca donde se depositaba la pira.

Anfiteatro

Frente a la Necrópolis y la vía Augusta, vemos el Anfiteatro que en 1973 fue donado al estado por sus propietarios, los Condes de Rodezno.

Siendo Carmona asentamiento habitual de las tropas romanas, no resulta difícil imaginarse a los soldados combatiendo en el recinto. Los canales del suelo por los que corrían las jaulas desvelan que aquí también se desarrollaban enfrentamientos con fieras. Asimismo se aprecian los cuartos para las armas de los luchadores y una estancia en la que se encomendaban a los dioses antes de saltar a la arena.

Convento de la Concepción

Cuenta la leyenda que este convento fue fundado bajo los auspicios de Isabel I con la finalidad de encubrir a una amante de su marido, Fernando "El Católico". Lo encontramos en extramuros de la ciudad y su fachada principal da al Paseo del Estatuto que cuenta con dos altos huecos de acceso. 

Un patio separa la fachada principal de la iglesia, de estilo gótico-mudéjar. En su interior destaca el retablo mayor, realizado por Tomás Guisado con elementos arquitectónicos góticos e influjos renacentistas.

Fuente de los leones

«Sobre 1515, se constata un hecho que será fundamental para el desarrollo de este espacio para uso y disfrute público. El Concejo de Carmona solicita a la reina Juana I de Castilla (Juana la loca) permiso y 50.000 maravedíes para la construcción de una fuente pública, dos pilares para el ganado y la demolición de varias casas necesarias para el acceso a la fuente».


Tras autorizar la reina las obras, la Fuente de los Leones, convertida en la fuente pública por excelencia de Carmona, ha sido un lugar de ocio y encuentro para sus habitantes. 

En sus inmediaciones, allá por el año 1794, se plantó una alameda, pulmón verde del arrabal carmonense.

Parroquia de San Pedro

Junto a la Puerta de Sevilla vemos esta iglesia parroquial construida en el siglo XV sobre el solar de la primitiva ermita de la Virgen de la Antigua. Uno de sus principales puntos de interés es la cúpula barroca, además de sus esculturas y orfebrería.


Llama la atención su torre-campanario terminada en 1783 y que a primera vista nos recuerda a la Giralda de Sevilla, de ahí que se la conozca como la Giraldilla.

Alcázar de la Puerta de Sevilla

Llegamos a la Plaza de Blas Infante donde, sobre la Puerta de Sevilla, se erige majestuoso el Alcázar formando un complejo defensivo que se antoja inexpugnable. 


Cabe destacar la enorme Torre del Oro, coronada con banderas desde la que se divisa todo Carmona y el campo de la comarca de Los Alcores.


En la actualidad es la sede del Centro de Recepción Turística.

Iglesia de San Bartolomé

Muy cerca de la Puerta de Sevilla nos encontramos con la iglesia de San Bartolomé levantada cuando el gótico estaba en su mayor apogeo sobre una de las mezquitas de la "Qarmuna" musulmana. Sus huellas barrocas evidencian las reformas que se llevaron a cabo en el siglo XVIII aunque las transformaciones del interior han sido eliminadas casi en su totalidad.


En su interior nos dan la bienvenida el Nazareno manierista de Francisco de Ocampo y la delicada Virgen de los Dolores, de Duque Cornejo, que hacen su salida por las calles de Carmona el Viernes Santo.

Cabe destacar el retablo mayor que data del primer tercio del siglo XVIII y una importante colección de pinturas como la de Santa Catalina de Alejandría, en el presbiterio.

Convento Madre de Dios

Mudéjar y Barroco se dan la mano en este convento al que accedemos por una pequeña puerta del serpenteante callejón de Madre de Dios tras visitar la Iglesia de San Bartolomé. Desde el año 1515 ocupan estas instancias un grupo de religiosas dominicas.

Una vez en el interior del recinto podemos ver un pequeño tramo del "Callejón del toro" por el que subían estos animales que desde la Puerta de Sevilla se dirigían los días de fiesta a la Plaza de San Fernando. 

Como elemento reseñable destaca un claustro de caracteres mudéjares que cuenta con una galería doble a base de arcos de medio punto apoyadas sobre columnas de ladrillo.

Ayuntamiento

El edificio sobre el que se asienta el Ayuntamiento fue originariamente el colegio de San Teodomiro, de la Orden Jesuita hasta que estos fueron expulsados en el año 1767 convirtiéndose en escuelas reales.


En torno al claustro del antiguo convento se distribuyeron las dependencias del Ayuntamiento y en otros espacios del edificio se pueden ver obras de gran valor histórico como un mosaico con el nombre de Las Cuatro Estaciones del siglo II; un cipo de Tulio Amelio del s. I d.C., en la sala de sesiones y fragmentos del mosaico de Bruma.

Iglesia del Divino Salvador

Anexa al Ayuntamiento, en la plaza de Cristo Rey, se encuentra esta iglesia que formaba parte del conjunto del colegio de San Teodomiro de la Compañía de Jesús de Carmona. Tras su expulsión pasa a ser un oratorio privado y, unos años después, es trasladada aquí la sede de la Iglesia parroquial del Salvador al ser demolida.






En su interior, en el retablo mayor del siglo XVIII y obra del carmonense José Maestre, una hornacina custodia la imagen del Divino Salvador.

Iglesia prioral de Santa María de la Asunción

Este templo de enormes dimensiones, es el edificio más grande de Carmona y el máximo exponente de su arquitectura religiosa. Llama la atención su parecido con la Catedral de Sevilla pero no es de extrañar ya que en su construcción y decoración intervinieron algunos de los mismos artistas como Diego de Riaño, Bautista Vázquez el Viejo, Hernán Ruiz, Juan del Castillo, entre otros. 


Se levantó en dos fases en el mismo espacio que ocupaba la antigua mezquita almohade que fue derribada, en 1424.  De ella se conserva el patio de las abluciones que es el denominado Patio de los Naranjos, en una de cuyas columnas se mantiene un calendario visigótico del siglo XI.

A los pies del templo, entre el Patio de los Naranjos y la capilla bautismal, vemos la torre cuyos dos cuerpos superiores no se completaron hasta el siglo XIX.

En su interior se custodia la imagen de la Virgen de Gracia, patrona de Carmona; el Cristo de los Desamparados, el Calvario, la Inmaculada Concepción...

Plaza de Abastos

En el solar donde antaño se encontraba el convento de Santa Catalina se encuentra el mercado de abastos de Carmona, obra de Ramón del Toro, realizada en 1842. Tras la restauración realizada en los últimos años se quiso transformar este espacio en un recinto comercial enfocado a las necesidades del momento.


En la actualidad este mercado tiene muy poca actividad como tal habiéndose convertido en una plaza para el ocio donde celebrar eventos culturales.

Convento de las Descalzas

Justo frente a la puerta de entrada de la Iglesia prioral nos encontramos con otro edificio de solera, es el convento de la Santísima Trinidad, conocido popularmente como convento de las Descalzas.

Para conocer algo de su historia tenemos que remontarnos al año 1629 cuando doña Juana Camacho dona unas casas de su propiedad  a la comunidad de Madres Agustinas. Estas a pesar de la oposición del cabildo eclesiástico fundan una nueva sede en la localidad.

Se trata de un conjunto de edificaciones formado por la iglesia y la zona de clausura estructurada en torno a un patio central.

Convento de Santa Clara

El Convento de Santa Clara de Carmona fue fundado en el año 1460 con la autorización del papa Pío II.



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Capilla de la Caridad

Junto al convento de Santa Clara está la capilla de la Caridad, única superviviente junto con algunas dependencias de lo que fue antaño un Hospital para pobres y que en la actualidad acoge un centro de la Tercera Edad.


El edificio fue levantado sobre las casas de las que era propietaria doña Beatriz Pacheco, duquesa de Arcos, que las donó para tal fin según dejó escrito en su testamento en 1511. 

La capilla guarda en su interior obras de gran valor como un San Francisco pintado por Zurbarán; la Visitación de la Virgen a Santa Isabel, una pintura del retablo mayor relacionada con el estilo de Murillo y una colección de pinturas en cobre donadas por la marquesa de Saltillo de principios del siglo XVIII.

Puerta de Córdoba

Llegamos a la Puerta de Córdoba que, junto con la Puerta de Sevilla, son las únicas que se conservan en Carmona de las cuatro que hubo en época romana.


Este impresionante arco de triunfo se ha ido modificando a lo largo de los siglos y desde su mirador se pueden contemplar las magníficas vistas de la vega y el conocido como Puente Romano de los Cinco Ojos.

Iglesia de Santiago

En la parte alta de la ciudad se localiza esta iglesia que según cuenta la tradición fue construida durante el reinado de Pedro I en el siglo XIV. En siglos posteriores ha sufrido varias reformas que han ido conformando su aspecto actual.

De su exterior destaca la cabecera en piedra y ladrillo, además de la portada principal de estilo mudéjar de los pies y la decoración de paños de sebka de la Torre.

Casa Palacio del Marqués de San Martín

Esta casa palacio, de origen musulmán, es propiedad del marqués de Caltójar. En ella destaca su interesante portada mirador del siglo XVIII.

Arquitectónicamente hablando, con el paso del tiempo ha conseguido mantener casi intacta su fisonomía original con vestigios árabes, romanos y mudéjares.

Plaza de San Fernando

Esta plaza también es conocida como Plaza de Arriba y aunque según la vemos tiene apariencia circular, parece ser que no siempre fue así ya que allá por el siglo XVI tenía forma de rectángulo cerrado.


Varios son los edificios que con sus diferentes estilos y formas conforman la plaza y el hecho de que abunden los balcones se debe a que desde ellos se podían presenciar las celebraciones públicas que se desarrollaban en este espacio, como corridas de toros. 

En uno de los extremos de la plaza vemos la Casa de la Antigua Audiencia que actualmente acoge unas dependencias municipales.



En la esquina de la calle Prim destaca el edificio del siglo XVI conocido como "la Casa Mudéjar" que está decorado con azulejos de cuenca o arista en los pisos altos y, en otra de las esquinas, el actual ayuntamiento, del siglo XVII.

La farola de hierro forjado que vemos en el centro procede de la Exposición Iberoamérica de Sevilla de 1929.

Iglesia de San Felipe

Continuamos nuestro paseo por las estrechas calles blancas en el interior del casco histórico de Carmona hasta que una torre campanario de ladrillo nos anuncia la presencia de la Iglesia de San Felipe.

De esta iglesia te sorprenderán los característicos rasgos arquitectónicos del estilo mudéjar local y su original torre-fachada.

De planta rectangular, consta de tres naves separadas entre sí por arcos apuntados que se apoyan en columnas adosadas. 

Al no celebrar culto, suele estar cerrada habitualmente. Actualmente es sede de la Hermandad de La Amargura, una de las más importantes de la Semana Santa de Carmona y que cuenta con la imagen más antigua de Sevilla: el Santísimo Cristo de la Amargura, obra de Jorge Fernández Alemán y que data de 1521.

Molino de la Romera

"Bienvenido al lugar donde la historia, la cocina tradicional y las nuevas miras culinarias se dan la mano". 

Así reza el incio de la web de este antiguo molino de aceite que se ha transformado en un atractivo restaurante donde se dan uso a ls antiguas dependencias.

Lo encontramos en la Ronda del Cenicero y si te fijas bien, podrás ver una inscripción en árabe grabada en un ladrillo que muestra el ambiente propio de finales de la Edad Media.

En su interior se distinguen un gran salón con chimenea, el salón de la viga, el salón de los arcos, el salón de las bóvedas que formaba parte del antiguo granero, el patio árabe donde hay un aljibe que almacena el agua de lluvia en invierno y un emparrado cuya sobra se agradece especialmente en verano.

Teatro Cerezo

Este edificio, localizado en el Paseo del Estatuto, fue uno de los más representativos de la ciudad de Carmona allá por los años 30. El nombre del mismo es un homenaje a la persona que corrió con todos los gastos tras haber sido premiado en la lotería y fue diseñado por Julián Otamendi en estilo ecléctico, inspirado en los teatros vieneses.

La construcción ocupa toda la manzana y, además del teatro, encontramos otro tipo de establecimientos como cafés, oficinas y la sede de la peña la giraldilla.

Qué comer en Carmona                                                    

En Carmona podemos degustar los típicos platos andaluces pero los más golosos no pueden dejar de probar la torta inglesa que las hermanas del convento Santa Clara elaboran entre las paredes de su convento.

Aquellos amantes de lo sano pueden probar un pisto de origen árabe y cuyos ingredientes principales son la calabaza y las berenjenas, las alboronías, o también unas deliciosas espinacas.

Desde el año 2013, Carmona exporta una marca de ginebra con fresa muy famosa conocida como Puerto de Indias.

Vídeo de Carmona                                                      

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