miércoles, 27 de septiembre de 2023

Los mejores rincones de Almazán


En el centro de Castilla nos espera esta villa fortificada en un paraje de colinas que rodeada de restos históricos nos evoca tiempos de esplendor y grandeza cuando los musulmanes la llamaba "El Fortificado".

Capaz de aunar modernidad y tradición aquí conviven en armonía  los relicarios de la historia y el arte, las costumbres más ancestrales y las nuevas profesiones relacionadas con la industria, la artesanía, la agricultura y la ganadería.


CONTENIDOS DEL ARTÍCULO

Mapa del sitio

Lugares de interés:

  • Santa María de Calatañazor
  • Iglesia de San Miguel
  • Ayuntamiento
  • Palacio de los Hurtado de Mendoza
  • Torre del Reloj
  • Mirador del Postigo de San Miguel
  • Muralla
  • Iglesia de San Vicente
  • Centro Cultural Tirso de Molina
  • Convento Espacio Grumer
  • Puerta del Mercado
  • Castillo
  • El Cinto
  • Puerta de Herreros

Vídeo


Mapa del sitio


Lugares de interés

Accedemos al casco histórico de Almazán  atravesando la Puerta de la Villa, una de las cuatro que quedan, y nada más hacerlo nos encontramos de frente la Plaza Mayor. La vemos rodeada por las construcciones más impresionantes de la villa, mostrándose como la "típica plaza castellana" orgullosa de ocupar  un espacio privilegiado en lo alto de esta atalaya.

La plaza comparte protagonismo con los edificios históricos que constituyen el mayor atractivo del lugar: la Muralla, la Iglesia de San Miguel y el Palacio de los Hurtado de Mendoza.

Santa María de Calatañazor


La primera construcción importante que nos encontramos antes de pasar por la puerta de los Herreros es la Iglesia de Santa María de Calatañazor. Se trata de un templo de una sola nave cubierta con bóvedas de crucería estrellada gótica.

Iglesia de San Miguel

En la plaza Mayor, formado un espectacular conjunto junto al Palacio y el Ayuntamiento, nos encontramos con este templo románico de espectaculares formas arquitectónicas. Por su originalidad artística, fue declarado Monumento Nacional en 1931.


Es especialmente llamativa la desviación en el eje que muestra la planta de la iglesia desde los pies a la cabecera.

En su interior destaca un frontal de altar románico esculpido en piedra que representa el asesinato de Santo Tomás Beckett por mandato de Enrique II de Inglaterra.

Ayuntamiento

En la parte baja de este espacio amplio y diáfano de la Plaza Mayor también reclama su sitio la Casa del Concejo, actual Ayuntamiento. Fue construido a finales del siglo XV coincidiendo con el reinado de los Reyes Católicos.

La planta baja está porticada con tres arcos que se apoyan en pilares cilíndricos de decoración estriada y florones. El piso superior sigue la misma distribución de arcos.

Palacio de los Hurtado de Mendoza

Cerrando la Plaza Mayor por uno de sus extremos, vemos el palacio donde vivió la familia más poderosa de la villa, los Hurtado Mendoza. En sus estancias, los señores de Almazán acogían a todos los visitantes ilustres y de la realeza que tuvieran a bien visitar el lugar.


La alargada fábrica del señorial palacio que tenemos delante fue edificada y renovada en distintas etapas, sobretodo durante los siglos XV y XVI. En la fachada principal podemos ver el escudo de armas de la familia Mendoza.


En los bajos del Palacio se ubica el Centro de recepción de Visitantes de Almazán que acoge las instalaciones de la Oficina de Turismo. El resto de las dependencias está destinado a dos salas musicalizadas donde se custodia y exponen cuatro tablas flamencas, del siglo XV, atribuidas a Hans Memmling.

Torre del Reloj

En la Puerta de la Villa, una construcción de ladrillo con cuatro lados, acoge sendas esferas de un ingenioso reloj que, además de la hora, ofrece otras informaciones de lo más originales.

Las esferas que dan a la ermita de Jesús y a la Plaza Mayor marcan las horas; sin embargo, la esfera que vemos desde la calle San Román, marca los días de la semana y, la que está orientada hacia San Miguel, el día del mes.

Mirador del Postigo de San Miguel



Sin salir de la Plaza Mayor atravesamos un pequeño arco que hay junto a la iglesia San Miguel donde está este espectacular mirador que se hizo coincidiendo con la remodelación de la Plaza Mayor. Colgado sobre el barranco nos permite contemplar el maravilloso paisaje en tonos verde y ocre junto al Duero.


Muralla

Como todas las murallas su función era defensiva por eso las puertas de entrada contaban con cerrojos cuyas llaves pertenecían al señor de Almazán. Este encargaba su custodia a algún vecino de confianza para que abriera al amanecer y cerrara con el toque de queda.

Entre las callejuelas que vamos pasando vemos trazos de muralla atrapados por las construcciones que empezaron a erigirse a finales del siglo XII. 

La técnica constructiva era sencilla, se levantaban dos fachadas interior y exterior con sillería a penas devastada y mal escuadrada. El espacio intermedio se rellenaba con cascotes de piedra, cantos de río y abundante argamasa de mortero y cal, conformando un paramento consistente y resistente a la climatología y paso del tiempo.

Iglesia de San Vicente

Tras el buen sabor de boca que nos deja pasear por la ronda de la muralla por un cuidado camino acondicionado para ello, pasamos junto a la antigua iglesia de San Vicente. Tras unos importantísimos trabajos de restauración, alberga en la actualidad el Aula Municipal de Cultura donde se desarrollan multitud de actividades.

Centro Cultural Tirso de Molina

Llegamos a la Plaza de los Olmos donde en un antiguo palacio totalmente reconstruido, se ubica el Centro Cultural. Se trata de un amplio espacio cuyas estancias se reparten la Biblioteca Pública Municipal, un Espacio de Trabajo Compartido y la Escuela Municipal de Música, entre otros usos polivalentes.

Convento Espacio Grumer

Este antiguo convento fue rehabilitado como un espacio para eventos, celebraciones, reuniones e incentivos. Lo cierto es que lo que menos te imaginas es que esta construcción albergue en su interior instalaciones que distan mucho de su función original.

Puerta del Mercado

Para llegar hasta la zona donde se ubicaba en su momento el castillo, atravesamos la Puerta del Mercado que dada su proximidad a la antigua fortaleza tuvo que tener su importancia en el pasado. Por su apariencia impecable, suponemos que ha sido restaurada recientemente. 

Atravesamos seguramente una de las puertas más características del recinto amurallado de la villa adnamantina y todo un símbolo de la grandeza de esta población soriana en la Edad Media.

La Puerta del Mercado suponía ella sola un fortín ya que estaba formada por dos potentes torres almenadas, dejando el hueco de entrada protegido por matacán.

Tiene dos torres rectangulares, anchas y macizas y está rematada en su parte superior por almenas. En sus inmediaciones vivía la colonia judía y se celebraba el mercado semanal en la Edad Media de donde tomó el sobrenombre.

Castillo

En el lugar conocido como El Cinto cuentan que, en el año 1088, Abderramán III fundó la población y su fortificación. Esta fue destruida y abandonada por los árabes 10 años después, hasta que tiempo más tarde Alfonso VI se encarga de su repoblación.

En el lugar que en su día ocupó el castillo de Almazán se encuentra el monumento dedicado al Sagrado Corazón de Jesús.

El Cinto

Nos encontramos en la parte más alta de Almazán donde este espacio natural y paisajístico  se contempla como el mejor mirador de la Villa.


Lo recorremos despacio y deteniéndonos a contemplar las fabulosas vistas que nos regala. Vemos restos de muralla, pasamos ante las tres cruces que formaban parte de un antiguo Vía Crucis y casi sin darnos cuenta llegamos a la Puerta de Herreros.

Puerta de Herreros

Tres son las Puertas por las que podemos acceder al maravilloso patrimonio histórico de Almazán: la del Mercado, la de Herreros y la de la Villa. Las tres fueron edificadas en la misma época y son muy parecidas con sus dos torres o cubos entre los que se abren arcos ojivales.


De la Puerta de los Herreros podemos decir que hace unos 40 años, la bóveda albergaba un crucifijo de nogal que el Ayuntamiento custodia tras haber sufrido un intento de robo. Se trata de un Cristo muy antiguo, de estilo gótico, que solo se ha expuesto en una ocasión.

Vídeo del paseo por Almazán

0 comments:

Publicar un comentario